Correr es una actividad de alto impacto que puede ser muy lesiva, dañando músculos, tendones y articulaciones. Este tipo de daños que se producen en el running, pueden ser minimizados gracias a la practica de otras disciplinas que disminuyan sus efectos negativos.

El Pilates, es un sistema que combina la gimnasia con el yoga y ejercicios de corrección postural, que hacen trabajar la fuerza de resistencia y calidad muscular, con el control mental, la respiración y la relajación.

  • Corrige desequilibrios musculares:
    En el running es muy común el sobreentrenamiento lo que provoca los desequilibrios musculares estos pueden causar molestias y lesiones en rodillas, cadera y espalda baja que pueden ser corregidos mediante ejercicios de pilates.
  • Corrige la postural a la hora de correr:
    El día a día nos pasa factura dando lugar a defectos posturales a la hora de sentarnos, de dormir y de correr. Durante la práctica del pilates tendremos que adoptar una postura correcta que después transferiremos a nuestra vida cotidiana y que nos aportará muchos beneficios como sufrir menos tensión en cuello, cabeza y hombros.
  • Refuerza el Core:
    Por ello, los corredores deben fortalecer y tonificar el recto abdominal, la zona lumbar y los músculos de la sección media de su cuerpo, siendo la principal zona de trabajo de los ejercicios de pilates.
  • Trabaja los músculos estirándolos:
    El Método Pilates trabaja de una manera diferente los músculos, ya que lo hace a lo largo de toda su longitud.  Promoviendo la activación de diferentes fibras, lo que reduce la tendencia a que ciertas partes del músculo empiecen a acortarse y se hagan más voluminosas.
  • Mejora el control de la respiración:
    La respiración marca el ritmo de los ejercicios, y aprender a respirar y a controlarla nos resultará muy beneficioso para practicar otros deportes ya que mejorará nuestra capacidad cardiovascular.

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